Fotografia Contemporanea Argentina

17 Agosto – 10 Septiembre 2005

Fabiana Barreda, Esteban Pastorino y Flavia Da Rin son tres exponentes de la fotografía contemporánea Argentina. Cada uno maneja distintos lenguajes y planteamientos, sin embargo comparten el gusto por una visualidad limpia y por imprimir, desde diferentes ángulos, visiones y sensibilidades que forman parte de la cotidianidad.

Dentro de su Proyecto Habitat, Fabiana Barreda nos presenta el hogar como punto central. Lo que desprende de la serie «Mi hogar son las líneas de la mano» y de sus Evas, es la vida de la mujer en el hogar con relación a su cuerpo, sus emociones y su espacio. La figura de la mujer se muestra casi andrógena e inmutable en cuanto a su contexto, en una especie de inercia consciente resultante de su papel en la vida doméstica, que desde la ambigüedad plantea la necesidad del deseo, de interiorización, de seducción, de apertura, de gestar y de vida. De generar vida.

Por su parte Esteban Pastorino experimenta en sus Panorámicas con un aparato llamado «strip camera», que logra sacar la foto a una velocidad consistente con el movimiento del objeto o sujeto fotografiado. En este caso escoge intersecciones de mucho tráfico en su natal Buenos Aires logrando un efecto casi de juguete en los peatones, vehículos y edificios por los que transita fugazmente, dejando paralelamente una sensación de aceleramiento y tiempo congelado, que nos induce a reflexionar sobre la monotonía y esa sensación tan actual de que todo pasa demasiado rápido y de cierta manera nos supera.

Flavia Da Rin nos introduce a un mundo de personajes y paisajes de cuentos, una aparente realidad que es tan solo una visión subjetiva de la nuestra, donde la artista se presenta como protagonista. Da Rin se acerca al lenguaje de la pintura desde la fotografía, compartiendo gestos de pinturas clásicas, colores de universos de fantasía, e imágenes que pueden relacionarse íntimamente con las escenas que cada persona atraviesa en el día a día, dejando claro que no son disfraces y escenografías, sino momentos cotidianos que se tiñen en un rosa media tinta.