Eduardo Tokeshi

10 – 30 Septiembre 2003

Eduardo Tokeshi es uno de los artistas peruanos contemporáneos con mayor trayectoria y reconocimiento en el medio cultural peruano. Egresado de la Facultad de Arte de la Pontificia Universidad Católica del Perú en 1992 ha realizado numerosas exposiciones individuales en el Perú y en el extranjero y sus obras se encuentran en importantes colecciones de Museos en el mundo entero.

Sus propuestas han sido múltiples y variadas durante toda su carrera artística. Esta versatilidad lo ha hecho realizador de trabajos conceptuales, políticos o simplemente estéticos de gran calidad y belleza. Sus obras llevan un sello muy personal que lo distingue y diferencia de los artistas de su generación.

Eduardo Tokeshi ha representado al Perú en múltiples eventos culturales en el extranjero, como la 23a Bienal de Sao Paulo o la Bienal de arte de la Habana. Ha recorrido durante su carrera diversos caminos algunos con una carga conceptual muy ligada a nuestro modo de ver la vida, costumbres y especialmente a convicciones profundas.

Tokeshi es uno de los artistas que mejor representan el arte peruano actual. Su obra se alimenta de diferentes fuentes portadoras de imágenes que se originan tanto en el arte popular peruano, como del colonial o de imágenes de internet. Esta iconografía se puede situar entre los extremos de un juego de provocación de amor o de muerte. Esta ambigüedad no hace sino enriquecer su obra que se convierte en un tipo de emblema de nuestras ilusiones y obsesiones colectivas.

La exposición que presenta en DPM consta de trabajos realizados al óleo sobre trupan en diversos formatos. Todas ellas componen un mosaico colorido y visualmente enriquecedor con múltiples lecturas.

Eduardo dice sobre su obra: “ «Quizás mi pintura sea el resultado de un encuentro, entre casual y provocado, de una serie de imágenes que me han perseguido y he perseguido: la violencia de lo cotidiano, la televisión, el comic, la modernidad en el subdesarrollo, la música, el zen, la Patria, la identidad, las relaciones entre la gente, el amor, el equilibrio, el instinto, la razón, el constante asombro por la realidad de un país en donde todo siempre esta apunto de suceder y a veces nunca sucede”.»

Rosario Wenzel
Directora ARTCO
Lima, Agosto 2003

Roberto Huarcaya

30 Julio – 22 Agosto 2003

Fotografía, pura invención. Si la historia de la fotografía la entendemos como la historia de un medio en cuyos mensajes se representa la realidad objetivamente, estamos ante un serio prejuicio. Porque en esta propuesta de Roberto Huarcaya, en la que subyace una evolución en su trayectoria fotográfica que vislumbra un camino abierto a la exploración sobre la naturaleza de la fotografía y de la existencia humana, se hace patente la superación de ese convencionalismo: con la fotografía se inventa, no solo se representa. Seguir leyendo

Vestido de Mujer

21 Mayo – 20 Junio 2003

Se extiende cada vez más la afirmación de que el mundo del arte se ha feminizado. Esta apreciación que podría confundir a algunos, no es más que un tácito reconocimiento a los notables aportes de las mujeres en vertientes punteras de cultura artística contemporánea. Como en la mayoría de las esferas de la actividad social, los hombres han dominado los predios del arte llevándose las glorias en la fundación de lenguajes y tendencias reconocidas.

Esta historia de flagrante dominación parece cerrarse con un nutrido ejército de féminas que discuten los roles protagónicos en los escenarios de la cultura. Lo interesante es que, a contrapelo de todo lo que se ha identificado como arte femenino, las huestes del otrora “sexo débil” esgrimen las armas más sofisticadas del intelecto aquellas que, junto a propuestas de alto riesgo y refinamiento conceptual obligan, constantemente, a revisar el trillado tema del sexo y el arte.

A esta apuesta de interpelar, subvertir y estremecer los códigos expresivos atribuidos a la feminidad, se apunta “Vestido de Mujer” , un diálogo intenso entre cinco artistas mujeres que sondean en los vericuetos de la subjetividad femenina y en la expresión de esta última, más como experiencia de mujer, que como conjunto de señales que esbozan una identidad definible y estable.

La muestra la integran: María Fernanda Cardoso, ( Colombia )artista cuya obra en conjunto rebasa cualquier intento de encasillamiento. A ella pertenece esa pieza antológica ya, en el arte contemporáneo internacional:“Circo de Pulgas”, poema visual de inefables intensidades. Priscilla Monge, ( Costa Rica ), sin dudas uno de los pilares del movimiento plástico que, con pujanza, exhibe hoy la región centroamericana; experta ella en afiladas y seductoras imágenes encargadas de vulnerar la sociedad machista y sus concepciones acerca de la mujer. Mónica Girón ( Argentina ) creadora que posee una notable solvencia conceptual para desafiar cualquier estereotipo surgido a partir de la relación posible entre arte y género. Manuela Ribadeneira ( Ecuador ) la misma que, junto a su empresa Artes No Decorativas, ha producido inquietantes alegorías de la sociedad actual y del mundo artístico y Janeth Méndez, un joven valor de la plástica nacional que apunta en la revalorización crítica de una laboriosidad casi perversa.

Ellas se “visten” de matices ambiguos y emprenden un escarceo en los roles asignados a la mujer por la cultura dominante, infringen con goce los “atributos” de la feminidad, los llevan con sarcasmo hasta el límite, desplegando sutilezas, ironía y cinismo.

Lupe Alvarez
Investigadora y Crítica de Arte

Placebo, elecciones 2002

Enero 2003

Placebo, en medicina, se denomina a la sustancia inerte, como el azúcar, que se emplea en lugar de un fármaco activo. Los placebos se pueden administrar a algunos pacientes con enfermedades incurables para inducir lo que se ha llamado efecto placebo: una mejoría, al menos temporal, del estado del paciente. Se sabe poco sobre su mecanismo de acción, pero se cree que la confianza del paciente en curarse puede estar relacionada con la liberación de sustancias químicas cerebrales denominadas endorfinas, opiáceos naturales producidos por el organismo. Sin embargo, el efecto puede ser negativo si el paciente alberga demasiadas esperanzas ya que dentro de la ilusión de mejoría se encuentra implícito un engaño. El tipo de respuestas a la administración de placebos no está asociada con un tipo particular de personalidad u otras características psicológicas.

El efecto placebo puede definirse como un cambio terapéutico en el estado del paciente que está causalmente conectado con el conocimiento (o la conciencia) personal que posee de encontrarse en una determinada situación clínica. Se trata, por tanto, de un procedimiento médico que no posee efecto fisicoquímico específico sobre la situación de dicho paciente.

-Matilde Ampuero

Reflexión:

El 15 de Enero, hora y día, del cambio de mando gran número de ecuatorianos y extranjeros residentes en el país estaremos atentos a la ceremonia presidencial, la cual vendrá acompañada del habitual discurso, tanto del presidente saliente como del entrante.

La mayoría de nosotros que hemos presenciado cambios de mandos, estaremos educadamente sentados escuchando las retóricas, momento de la dosificación. En nosotros estará un doble sentimiento: credibilidad motivado por la esperanza de mejores días, por un lado, e incredulidad por otro, siendo este último superado muy posiblemente por el primero, por el instinto natural de supervivencia; unos boquiabiertos, otros deslumbrados por los cambios ofrecidos, recibiremos nuestra dosis de esperanza, la cual tendrá un efecto emotivo en nuestra personalidad, repercutiéndose por algún tiempo en nuestras vidas cotidianas.

El presidente electo nos dosificará vía ofrecimientos, sustancias inertes de las que estuvieron compuestas sus discursos electorales, sustancias que incluyen la promesa de una sociedad civil con mayor capacidad de acceso a riquezas y servicios, sin embargo, nuestra historia nos conecta con el abuso de poder, con la mala legislación, con los valores vitales erróneos, con la decadencia y los gobiernos obsoletos.

Más allá de imponer una temática a esta exposición, dpm arte contemporáneo propone una muestra de reflexión: el efecto Placebo no es endémico de nuestra sociedad ni de la región latinoamericana, más bien forma parte de un sistema político-social que abarca a un gran número de naciones en las distintas latitudes del globo.

La muestra Placebo podría ser interpretada como una metáfora; Jean Baudrillard decía “…No se les puede poner un nombre a los instigadores de la conspiración, ni tampoco se puede identificar a las víctimas, ya que esta conspiración no tiene un autor y todo el mundo es la vez víctima y cómplice. Lo mismo ocurre con la teatralidad de la política: todos estamos a la vez estafados y coimplicados. Hay una especie de incredulidad, una ausencia de compromiso que significa que todo el mundo está jugando un doble juego en un infinito círculo vicioso…”.

Luis Molinari

20 Noviembre – 20 Diciembre 2002

En las artes plásticas del Ecuador, el nombre de Luis Molinari Flores sobresale entre el reducido número de artistas que innovaron y realzaron el arte moderno.Seguir leyendo

Roberto Noboa

31 Julio – 16 Agosto 2002

«En esta exposicion mostraré obras realizadas en lienzo aunque la mayoria son sobre papel. Los papeles juegan un doble rol: pueden funcionar como bocetos y como obras terminadas; en ellos utilizo diversos materiales como la tinta china, carbon, lapiz y acrilico, mientras que los lienzos, de gran formato, son pintados todos con acrilico y en algunos casos tambien con oleo.

Trabajo con simbolos que se repiten, un ejemplo son las aves, que casi siempre son gallinas, aunque ahora mientras trabajo tambien llegan buitres y cisnes. Las gallinas aparecieron por primera vez en una serie de cuadros que pinté en 1995. Algunos de los titulos de esas obras eran «GALLINA», «UNION», «TRES GALLINAS», «DESCOMPOSICION #2», «DESAPARICION DE DOS GALLINAS». Si se observa con detalle, en los cuadros de esta exposicion aparecen partes de esos cuadros. Y es aqui donde entran las guitarras (en su mayoria FLYING V’s), baterias, platillos. Instrumentos musicales que son utilizados exclusivamente para hacer ROCK pesado o HEAVY METAL y tambien PUNK. Siempre me he cuestionado las letras de: Bon Scott, Lemmy, Lars Ulrich, Rod Halford, Blakie Lawless, Les Claypool, entre otros. Como muchos de mi generacion, yo crecí escuchando y tocando la musica mas pesada que el mundo ofrecía.»

Luis González Palma

19 Junio – 11 Julio 2002

«En el contexto guatemalteco, Luis González Palma destaca por la consistencia de su produccion. Referencias al rito o a la devocion se observan en la calidad ambiental de sus fotografias, de impecable tecnica, en el diseño y asociacion de imagenes, y en los objetos y planos no fotograficos. Las telas, las lamparas, los portarretratos y los marcos dialogan con retratos y con imagenes paralelas que incluyen desde una bola de futbol a un helicoptero militar o un pastel de cumpleaños, todo empleado en la construccion de una simbologia del conflicto, la ausencia, la inocencia, el dolor, el silencio, el problema etnico, la herencia catolica, el tiempo y la ostentacion absurda. Sus fotografias inspiran una gran nostalgia, potenciada por el añejamiento en sepia que remite a las fotos antiguas. Los retratos de González Palma suelen mostrar rostros indigenas y mestizos, refiriendo a la historia social latinoamericana, dentro de la cual el anonimato de las poblaciones indigenas y la penetracion radical del catolicismo han sido las huellas mas visibles y perdurables de la colonia. Esas mismas huellas estan en la base de la confrontacion de tradiciones culturales, que de forma mas o menos abierta palpita en la sociedad guatemalteca. No obstante, González Palma se concentra en los aspectos sublimes del conflicto, en el caracter romantico de la tragedia.

En su trabajo con el espacio mediante proyecciones, ambientes e instalaciones, se hallan perfectamente engranados los elementos fotograficos. En La mirada critica (1999), varios retratos frontales de una joven de rasgos indigenas con una cinta metrica rodeando su cabeza, cuelgan en las paredes, en medio de un ambiente pretencioso en el que lamparas de araña y una alfombra roja recuerdan el fausto descarado de la Iglesia y el Estado ante la miseria de la poblacion. El retrato remite a los estudios sobre la fisonomia de los indigenas, relacionados con la tendencia a examinar al sometido y al extraño con curiosidad estetica. Entre la observacion objetiva y la denuncia, la obra de Gonzalez Palma muestra un tratamiento exquisito del tema etnico, y un gran peso de la voluntad poetica, por lo que logra crear una version sublime del panorama social contemporaneo, lejos del folclor.»

-Vivianne Loría. Marginalidad y transculturacion en el arte centroamericano (fragmento). Lapiz Revista Internacional de Arte # 177. España.

Luis Felipe Noé

8 – 24 Mayo 2002

El ingenio creativo de Luis Felipe Noé, enraizado en una vida atenta a las preocupaciones sociales, no podía sino vehiculizarse por medio de enfoques proclives a un tratamiento pictorico diverso, ya que, esencialmente, el punto de partida la asuncion del caos permanece intacto.

Su obra demuestra que asumir el caos no es disolverlo sino acrecentarlo, pero que solamente acrecentandolo puede ser asumido. Porque se trata de un proceso cultural de rechazo de una orden y busqueda de otro, y es por lo tanto continuo, sinuoso y abierto, donde alternan el azar y la necesidad, la duda y la certeza, el ansia y el prejuicio.

Noé preconiza, en el fondo, una suerte de ascesis historica y antropologica, un desasirnos de las leyendas y falacias con que disimulamos nuestras riquezas, nuestras caidas, nuestras imposibilidades, nuestras carencias, para medirnos y valorarnos tal cual somos y no como fingimos (hasta creerlo absolutamente) ser. Para eso, no hay otro camino que el de indagarnos y conocernos, y Noé empieza consigo mismo esa ardua inquisicion socratica. Dice un antiguo proverbio Arabe: «Nadie puede salir fuera de su sombra.» El arte de Noé cabe por entero en esa incertidumbre, que él desea ver generalizada.

El sentir y el pensar, que mucha filosofia ha considerado operaciones diferenciadas y aun antagonicas, son en Noé indisociables, constituyen esa inteligencia sentiente definida como la manera en que aprehendemos la realidad.